miércoles, 28 de enero de 2015

Chema Madoz en la galería Elvira González

La Galería Elvira González inaugura el próximo 22 de enero la primera exposición individual en la galería del fotógrafo Chema Madoz. La muestra –que podrá visitarse hasta el 14 de marzo– se compone de 35 fotografías realizadas entre 2012 y 2014. Estas nuevas imágenes continúan en la línea de trabajo del artista que con sus fotografías en blanco y negro crea metáforas poéticas e inesperadas a partir de objetos cotidianos.

Con una larga trayectoria internacional, Madoz fue reconocido en el año 2000 con el Premio Nacional de Fotografía y ha sido protagonista de una de las muestras más destacadas en la edición de 2014 de Les Rencontres d'Arles (Francia), el festival de fotografía europeo de mayor relevancia internacional.

Chema Madoz (Madrid, 1958), comienza su andadura profesional en 1990 tras pasar por el Centro de Enseñanza de la Imagen de Madrid. LaReal Sociedad Fotográfica de Madrid expone la primera muestra individual del autor en el año 1985 y en 1988 la Sala Minerva del Círculo de Bellas Artes de Madrid inaugura su programación de fotografía con una exposición de sus obras.

Es a partir de los años 90 cuando comienza a desarrollar su trabajo fotográfico con objetos de uso cotidiano como punto de partida para crear imágenes de carácter onírico y surrealista, característica constante en su obra hasta la fecha. “Por Madoz sabemos de cuántas vidas diferentes le hubieran podido aguardar a un fósforo o a una escalera si su destino no hubiera sido el de servir finalmente a nuestra necesidad de fuego o de vencer la gravedad”, describe el filósofo e historiador del arte Luis Arenas. “Todos esos mundos de Madoz son mundos improbables, ciertamente, pero no imposibles: ahí están ante nosotros para demostrarnos su realidad”.

A partir de entonces recibe diversos reconocimientos como el Premio Kodak en 1990 y la Bolsa de Creación Artística de la Fundación Cultural Banesto en 1993. La editorial Art-Plus edita en 1995 su primera monografía: el libro Chema Madoz (1985 - 1995). Y en 1999 el Centro Gallego de Arte Contemporáneo de Santiago de Compostela realiza una exposición individual de su trabajo. Será ese mismo año cuando el Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía le dedica la exposición individual Objetos 1990 - 1999, que constituyó la primera muestra retrospectiva que este museo dedicaba a un fotógrafo español vivo.

Desde entonces ha expuesto en numerosas galerías y centros de arte a nivel nacional e internacional como la Real Sociedad Fotográfica de Madrid, el Canal de Isabel II, el Centro Pompidou de París, el Netherland Photomuseum de Rotterdam, la Fundazione M. Marangoni de Florencia, el Museo de Bellas Artes de Caracas o el Fotofest de Houston, entre otros.

Su obra está presente en buen número de colecciones públicas y privadas como la del Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía, el Centro Andaluz de la Fotografía, la Fundación Juan March, la Fundación Telefónica, la Fundación Coca-Cola, el Museo de Bellas Artes de Buenos Aires, el IVAM, el Ministerio de Cultura, la colección Fotocolectania en Barcelona y el Fine Arts Museum de Houston, entre otros.

www.elviragonzalez.es

miércoles, 21 de enero de 2015

Jacobo Castellano en F2 Galería

Homo Ludens representa la primera exposición que Jacobo Castellano realiza en F2 Galería. En ella se observa una evolución de su obra desde que a finales de los años noventa se da a conocer como artista: el hogar materno, los escenarios donde transcurrió su infancia, los objetos “inservibles” y desvencijados, pero para él llenos de vida (“los objetos tienen biografía”, dice el autor), y los recuerdos de la niñez, conformaron el magma de su proceso creador.

Evolución ésta, lógica, producto de su tenacidad, de lecturas que fundamentan aquel proceso, y de la observación crítica de objetos cotidianos, aparentemente simples, que están presentes en la realidad, y que él transforma con su mirada. Pero este progreso no es lineal, no es siempre hacia arriba. Su trayectoria profesional crece a modo de espiral, volviendo constantemente a objetos y escenarios del pasado, pero cada vez con una visión diferente que le hace crecer como artista. Porque el autor no hace las cosas “por hacerlas”, por rellenar un tiempo, porque tiene que producir. Jacobo Castellano tiene un discurso, un relato coherente con el que apoya y explica su obra: esta actitud dota a su trabajo profesional de sinceridad y honestidad, pues para él lo importante es la paulatina consolidación frente a la inmediatez, las prisas y las urgencias.

La escultura es el formato preferido por Jacobo Castellano, a través del cual da rienda suelta a su imaginación y creatividad. Así lo hace en Homo Ludens. Sus piezas son sencillas, simples y desprovistas de ornamentos que puedan desviar la atención del espectador, pero a la vez profundas, que encierran un cierto misterio, que te invitan a pensar y a hacerte preguntas. Con frecuencia te sumergen en un mundo de claroscuros, te dejan un cierto sabor agridulce..., decididamente no son bonitas, o pueden no serlo, pero a estas alturas sabemos, que en el arte, lo bonito con frecuencia no es sinónimo de bello.

De las temáticas que conforman su obra (la memoria, el juego, el dolor…) el autor se decanta esta vez por destacar el juego como elemento esencial en nuestras vidas, los juguetes como contribución a aprendizajes esenciales; idea ésta transversal a toda la exposición con la que está muy familiarizado, pues no en vano ha crecido en un ambiente donde “lo pedagógico” ha ocupado un papel relevante. El acto de jugar es consustancial a nuestra cultura. Mediante el juego liberamos energía, nos relacionarnos, satisfacemos deseos no realizados, nos prepararnos para la vida y adquirimos valores.

En este sentido, los materiales que utiliza como el papel, el polvo, la madera, el plástico o el jabón, están al servicio de esta idea. Con ellos juega, los manipula y los ensambla hasta que considera que la obra creada expresa la idea que previamente ha diseñado en su mente. Así, objetos de uso cotidiano como los palillos, merced a sus dimensiones y dispuestos de una manera concreta, nos recuerdan al juego de “tres en línea”; el polvo que puede generarse en una vivienda y las escamas de jabón se mezclan misteriosamente para crear un nueva versión del “cubo de Rubik”; una disposición aparentemente anárquica de materiales da como resultado un “collage” en el que dichos materiales están agazapados, como jugando al escondite; un “pelele” se ensambla de manera que podamos utilizarlo y jugar con él a nuestro antojo. “Pasatiempo” representan “bajos relieves” rescatados de un espacio lúdico de la ciudad de Betanzos donado a ésta por los hermanos García Naveira, unos emigrantes gallegos que tenían una visión muy avanzada de “lo lúdico” como bien social.

Pero en este espacio lúdico que conforma la exposición no todo es alegría o divertimento, hay algo de asombro y de inesperado: los futbolines que invitan a la diversión no tienen jugadores; la posición del dedo índice de la mano señala castigo; nos divertimos dibujando pero estos dibujos no tienen nada de risa o de alegría: ¿en qué ambiente se habrá criado este niño para expresar así sus sentimientos? ¿Qué escala de valores estará forjando? ¿Qué vivencias estará interiorizando?

Dice Vicente Verdú que “lo divino es el silencio, que lo importante es la nada”: creo que esta idea puede aplicarse al conjunto de piezas que conforman Homo Ludens y a toda la trayectoria creativa de Jacobo Castellano.

Texto: José Antonio Delgado.

miércoles, 14 de enero de 2015

El Museo Reina Sofía comienza 2015 presentando la exposición del artista Daniel G. Andújar

El Museo Reina Sofía presenta la primera muestra del año el próximo 20 de enero a las 12.00 horas. La obra del artista Daniel G. Andújar llega a Madrid bajo el título de Sistema operativo, una muestra que reúne alrededor de 50 proyectos creados por Andújar en los últimos veinte años. La mitad de estos proyectos son trabajos previos, y el resto obras de nueva creación concebidas para los espacios del Museo. 

Andújar está considerado uno de los mayores representantes en España del llamado net-art. Interesado en construir un discurso cultural a través de los medios digitales y de las tecnologías, cuestiona, revisa y reflexiona mediante la ironía y la utilización de estrategias de presentación de las nuevas tecnologías de la comunicación, las promesas democráticas e igualitarias de estos medios, criticando al tiempo la voluntad de control que esconden detrás de su aparente transparencia. 

Estarán presentes para atender a los medios de comunicación el director del Museo y comisario de la muestra, Manuel Borja-Villel y el propio artista, Daniel G. Andújar.

ACTIVIDAD RELACIONADA: Encuentro con Daniel G. Andújar; el comisario de la exposición, Manuel Borja-Villel y la crítica de arte Iris Dressler. 21 enero, 19:00 h / Edificio Nouvel, Auditorio 200.